Se dice, se conoce, se comenta, que hace muchos años, allá por los 60, un local londinense (ahora no doy con el nombre) era el centro de reunión de varias estrellas de la época, desde Sean Connery hasta Keith Richards o Jim Morrison. En dicho garito tocaba casi siempre Eric Clapton junto a su grupo Cream, de hecho, Clapton era considerado el dios de la guitarra en Inglaterra y en ese local daba rienda suelta a sus maravillosos dedos, haciendo entrar en trance a cualquiera que le escuchaba. En su honor pusieron una inscripción encima del escenario "Eric Clapton is God".
Un dia entro un negro de pelo afro procedente del Sur de EEUU, fue a ver a Clapton y dicen que no daba crédito a lo que veia, dijo algo como "...nunca he visto algo asi en toda mi vida...". Aquel negro era Jimi Hendrix y esa noche Eric Clapton le invito a tocar junto a él. Los espectadores no se lo creian, estaban viendo en un escenario a los dos mejores guitarristas del mundo. Más de uno en la actualidad se cortaria una mano por ver eso.
Hendrix empezo a tocar, hasta que al final de la canción se desato. Clapton y Cream se vieron desbordados y solo pudieron mirar y mirar. Con los dientes, de rodillas, con los codos...aquel negro hizo que a más de uno le diera un infarto. Muchos ingleses comprendieron que había vida mas allá del atlántico. Años despues Jimi Hendrix murio de sobredosis y desde ese día encima de la inscripcion de Clapton hay otra "Jimi Hendrix is more than God".
1 comentario:
Chaval, me quito el sombrero desde mi leve resaca. El mejor post que has hecho, tan bueno que me dan ganas de plagiarlo. Ole.
PD: me duele la cabeza, tengo que dejar de beber cerveza...
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